jueves, 1 de octubre de 2009

Mientras uno transparente, otro opaco.
Mientras
uno mitad, otro completo.
Mientras uno simple,
otro complejo.
Mientras uno espera, otro corre.
Mientras
uno uno, otro dos.
Mientras uno más, otro menos.
Las relaciones del hombre siempre van en
desventaja, mientras uno pasa la luz verde, otro se queda estancado con una maldición en la boca y un alto en la calle más transitada.
Siempre la "unidad bio-psico-social trascendente" termina por llamarse animal jadeante y babeando por
obtenerlo todo a costa de todo, sin pagar nada.
El
sueño del hombre, nunca es alcanzar la virtud, encontrar la verdad, actuar con bondad; siempre ha sido: poseerlo todo…
Mientras uno posee, otro padece.